Si de verdad queréis veros espléndidas y notar un cambio radical en una sola sesión, el Indiba os devolverá, un aspecto sereno, joven firme y dulce. Un efecto que marca la diferencia en vuestra cara después de pasar por él.
Su efecto es acumulativo: rejuvenece la piel, reafirma el rostro, cuello y regenera el colágeno, y que cuantas más sesiones disfrutéis más beneficios obtendréis, también es cierto que desde la primera sesión el aspecto de la piel mejora de manera radical. El día posterior a una sesión de Indiba la cara es otra.
¿Qué es?
El indiba es un tratamiento, no invasivo e indoloro, que produce una diatermia localizada en nuestro cuerpo. De efectos solo beneficiosos, totalmente inocuo. Se trata de un calentamiento local de tejidos en una zona del cuerpo bajo la influencia de un campo eléctrico o magnético. Este aumento de temperatura controlado se produce por la circulación de una corriente de alta frecuencia, que provoca un aumento de la temperatura desde el interior de las propias células. La intensidad del calor depende de la zona y problema estético a tratar. La sensación que produce es relajante y agradable.
El secreto del éxito
Este proceso hace que nuestro propio organismo incremente la síntesis de colágeno y elastina. Consigue luchar contra la flacidez mediante la estimulación de los fibroblastos consiguiendo que éstos generen nuevo colágeno.
El tratamiento produce una mejora en la elasticidad, hidratación, suavidad y favorece la regeneración de la piel. Se puede aplicar en el contorno de ojos, y además reduce las bolsas gracias al efecto drenante. Aporta hidratación, luminosidad y reafirma el contorno. Al ayudar a eliminar toxinas, los edemas o hinchazón de la cara se reducen.
La aplicación de energía de radiofrecuencia permite acceder a las capas profundas de la dermis actuando directamente sobre las fibras que tensan la piel y hacen que estas se contraigan y aumenten provocando el estiramiento de la misma. Nutre y revitaliza de la dermis.
¿Cómo se lleva a cabo?
El Indiba, se aplica con dos electrodos metálicos (dos placas metálicas, una se desplaza sobre la zona a tratar y la otra permanece fija bajo vuestro cuerpo en la parte posterior a la zona que se esta tratando. Mediante la radiofrecuencia se provoca una temperatura interna, cada célula de nuestro tejido recoge parte de esa energía y la transforma en calor. Es nuestro cuerpo quién produce el aumento de temperatura ( parecido al efecto de la fiebre). Este calor debe ser agradable en todo momento.